Reyes del camino

Austria y España dividen los honores en el Rally México, celebrado en caminos guanajuatenses

En una alianza no concertada, España y Austria se dividieron el botín del Rally de las Naciones, concluido ayer con la brillantez de cualquier competencia mundial.

La Armada Española, formada por Xavier Pons y Dani Solá, completó un fin de semana de valentía pura y alcanzó el título de naciones con 10 triunfos en 18 Especiales.

A Manfred Stohl, líder del grupo austriaco, no le importó demasiado la cesión de esa corona, pues terminó en primer lugar entre los pilotos, con Andreas Aigner, su compatriota, a 14 segundos.

El francés Didier Auriol completó el podio e igual festejó en el Foro del Lago de Explora, a donde acudieron miles de aficionados para despedir un evento que sustituyó cabalmente al Campeonato Mundial.

La de ayer fue una jornada de arrojo y estrategia. En la lucha por el máximo premio del Rally de las Naciones, los españoles no soltaron el acelerador hasta asegurarse el botín.

Como en las dos jornadas previas, Pons y Solá salieron a ‘comerse’ los caminos desde el primer segundo. Los ibéricos confirmaron así un plan largamente estudiado.

Su estrategia ayer y en los días previos fue la de ganar tramos sin importar el desgaste de sus autos en las Especiales posteriores.

Así, aunque perdieron el tramo de Comanjilla, se aseguraron la corona con un triunfo en la última Súper Especial. Solá ganó en el Autódromo con Pons en tercera plaza.

Además del reconocimiento a su país, los ibéricos se llevaron 50 mil dólares como premio por el título de naciones, 15,000 por los lideratos diarios y 5,000 por los tramos ganados.

El premio de Manfred Stohl fue más simbólico, luego de una extenuante batalla con Andreas Aigner, su compañero en la representación austriaca.

Como en la mejor batalla, ayer Stohl estudió sus movimientos al extremo, afinó sus mejores armas y, para dar el golpe final, sorprendió a su rival en el momento preciso.

Stohl abrió con el acelerador a fondo, sin cuidar la ventaja de siete segundos en la jornada anterior. Aigner no esperaba tanta valentía y sólo en el tramo Comanjilla perdió nueve segundos.

Ahí se despidió del triunfo, con sólo una etapa Súper Especial como esperanza. Stohl no volvió a llegar al límite, pero Aigner decidió firmar la rendición con la promesa del podio.

Así, los reconocimientos compartidos beneficiaron a una afición que en sólo ocho meses retomarán las terracerías, esta vez para el Campeonato Mundial.

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